La Cámara de Comercio de Granada y la Confederación Granadina de Empresarios (CGE) se han sumado al manifiesto de adhesión al proyecto ‘Granada Capital Europea de la Cultura 2031’ impulsado por el Ayuntamiento. La plasmación del apoyo se ha hecho realidad esta semana en el Consistorio con la firma del documento por parte del presidente de ambas organizaciones, Gerardo Cuerva, y la alcaldesa de la capital, Marifrán Carazo, quien ha reiterado la necesidad de “un amplio movimiento de apoyo social y ciudadano en torno a esta candidatura”.
En este sentido, la primera edil ha agradecido a Gerardo Cuerva su “implicación, en este ilusionante proyecto al que todos estamos aportando nuestro granito de arena, y para el que, desde el Ayuntamiento, solicitamos el apoyo de asociaciones, colegios profesionales y colectivos de la ciudad en torno a esta Granada que inspira, y que atrae a artistas que vienen aquí a crear, diseñar y fortalecer nuestra vida cultural”.
Tras recordar que el Ayuntamiento promovió la iniciativa de la Capitalidad Cultural en el año 2015, la primera edil ha destacado “el trabajo realizado por este equipo de Gobierno, para tener todo listo a la espera de los plazos que establezca el Ministerio, teniendo en cuenta que partíamos de cero y que deberemos pasar el primer filtro en el año 2026”.
Carazo ha agradecido también la adhesión al proyecto de la Cámara de Comercio y CGE, “la primera que se produce” desde que, el pasado días 13, se firmara en el Consistoria el manifiesto inicial por parte de la Diputación y el Ayuntamiento.
“Granada cuenta con una rica historia y una vibrante escena cultural y científica, y estamos convencidos de que disponemos de todos los atractivos y requisitos exigibles para que la Unión Europea nos vea como la futura Capital Europea de la Cultura 2031”, ha asegurado. “Somos una ciudad que valora sus tradiciones artísticas y culturales, pero también impulsa nuevas formas de expresión y tecnologías, fomentando la creación artística mediante el apoyo a artistas locales e internacionales y la organización de innumerables festivales, exposiciones y eventos culturales”.
Por su parte Gerardo Cuerva ha señalado que la adhesión de la Cámara de Comercio y la Confederación Granadina de Empresarios supone que el tejido empresarial granadino se pone en su totalidad a disposición del Ayuntamiento y la candidatura para trabajar en un proyecto sólido “que no sólo logre la capitalidad sino que contribuya a esa transformación de Granada en la que todos estamos empeñados”.
En ese sentido el presidente de Cámara Granada y la Confederación Granadina de Empresarios ha apuntado que “lo cultural” es sin duda uno de los grandes motores de desarrollo de Granada, por lo que a su juicio el desafío no es que “en Granada sucedan cosas, sino que Granada trabaje para que la dimensión cultural sea parte protagonista de su estrategia de progreso social y económico”.
El Manifiesto define Granada como una ciudad de futuro que ha sido y sigue siendo un cruce de culturas y civilizaciones, que valora el diálogo intercultural y la cooperación internacional “y que se propone seguir fomentando el intercambio cultural, creativo, científico y de investigación con otras ciudades europeas y del mundo, aprendiendo y compartiendo experiencias y conocimientos. Granada promueve la diversidad cultural como una fuente de riqueza y entendimiento mutuo y apoya iniciativas y proyectos para la integración, la paz y la comprensión global”.
El texto, que recoge la importancia del sector cultural como motor de desarrollo e innovación en el ámbito económico a través de actividades como la educación, el arte, el desarrollo personal, la ciencia, el turismo o el ocio, establece que el proyecto de Granada “es plenamente respetuoso con los valores y objetivos de las Capitales Europeas de la Cultura por lo que deseamos expresar públicamente nuestro deseo compartido con la ciudad de promover la cultura como motor de creatividad, así como la inclusión social, la sostenibilidad y el diálogo intercultural en los planos local, nacional e internacional”.
Con este fin, los firmantes del documento de adhesión se comprometen a reconocer el valor intrínseco de las artes y de la cultura, así como su potencial estratégico para la sociedad, promover prácticas culturales sostenibles y respetuosas con el medioambiente, un turismo respetuoso con la calidad de vida de los ciudadanos y la igualdad de oportunidades para el disfrute y la participación en actividades culturales por parte de la ciudadanía.
Del mismo modo, acuerdan estimular la creación artística y fomentar la innovación y el emprendimiento en los sectores cultural y creativo, contribuir al reconocimiento profesional del sector, apoyar programas educativos que acerquen la cultura a todos los grupos sociales, eliminar barreras físicas y sociales para asegurar que todos, sin excepción, puedan disfrutar de la cultura y favorecer políticas que posibiliten “una adecuada financiación a la programación cultural y una retribución justa y digna a los profesionales, como herramienta de creación de empleo vinculada a la cultura”.
Un desarrollo urbano sostenible, más infraestructuras culturales, el uso responsable de los recursos, la mejora de la calidad urbana con espacios que integren el arte y la naturaleza, un turismo sostenible o la apuesta por la creatividad, la inclusión, la sostenibilidad y la cooperación intercultural, son otras de las propuestas recogidas en el Manifiesto.